Te abren la puerta del carro.
Te ceden el asiento en la combi.
Te dan la mano para bajar.
Te invitan.
Te ceden la parte más segura de la vereda.
Te ayudan a abrir frascos, arreglar cosas, cambiar llantas.
Te regalan flores, hasta poemas.
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Van a 100 por hora, chocan y te matan.
Sólo cuando usas minifalda, o escote o eres anciana.
Aprovechan para abrazarte cuando caes del enclenque brazo.
Lo más barato y cuando les sobre o quieren que les pagues en especie.
Sólo cuando no llueve.
Terminas arreglando lo que han roto.
Te golpean, humillan, se van con otra.
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La sinceridad del hombre es ser lo que le enseñaron: caballeritos. Su manera de seducir.
La sinceridad de la mujer es decir gracias a todo y sentirse feliz, del hombre que protege, cuida, respalda ... dependes.
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La seducción tiene género parece. Patrones que se repiten.
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